La moda de los sexcoach

La moda de los sexcoach

Un sexcoach, o coach sexual, es un entrenador o un especialista en sexo que te ayudará a mejorar en determinados aspectos de tus relaciones íntimas. El sex coaching es algo muy novedosos en nuestro país, y está siendo muy aceptado por la parte de los sexólogos y psicólogos.

 

¿Qué diferencia hay entre un sex coach y un sexólogo?

Lo primero que debemos tener en cuenta para entender la diferencia es la forma que tiene cada experto de tratar el problema. El sex coach no tratará al cliente como si fuera un enfermo, o como si tuviese una patología. En lugar de ello, el enfoque que se le dará es el de que pueda descubrir su sexualidad para que pueda disfrutar de ella en su máximo esplender.

Ahora bien, el sex coach no tendrá ninguna responsabilidad en el proceso, si no que será el propio cliente el que la asuma. El coach le acompañará durante todo el proceso de cambio, aunque no lo dirigirá, para que cada persona pueda ser consciente de ser lo que realmente quiera ser.

Hay muchas técnicas que puede usar el sex coach para llegar a este objetivo: pueden usarse las mismas que emplea un sexólogo, hasta de PNL, de sexualidad consciente, de Tantra, etc.

¿Cuándo es el mejor momento para acudir a un sex coach?

Podemos acudir a un sex coach en el momento en el que detectemos algún problema en nuestras relaciones sexuales, si no conseguimos disfrutarla con plenitud, si no sentimos deseo sexual, si tenemos algún problema de erección o dificultades para alcanzar el orgasmo.

Otro motivo para ver a un sex coach es el de derribar barreras: es posible que no terminemos de disfrutar plenamente de la sexualidad por nuestras creencias o educación. De esta manera, el sex coach también es un educador, una persona a la que le podemos trasladar nuestras dudas e inquietudes, creencias y hasta tabúes, para que el cliente pueda experimentar su sexualidad con plenitud.

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¿Cómo trabaja el sex coach?

Un procedimiento de Sex Coaching empezará con el profesional recopilando toda la información posible, creando así conexión y empatía mediante la escucha activa.

Habrá una primera fase en la que el sex coach descartará la posibilidad de que el problema sexual se deba a una enfermedad. En el caso de que haya alguna duda, ahí se acabará la sesión y el paciente tendrá que acudir a un profesional. Sin embargo, se calcula que más de un 90% de los problemas sexuales tienen su base en motivos psicológicos.

Si todo va bien, el Sex Coach hará preguntas al cliente para que llegue a la conclusión por si mismo de cuáles son sus prejuicios, creencias y tabúes que le impedirán disfrutar del sexo con toda plenitud.

Habrá una última base en la que el Sex Coach invitará al cliente a hacer determinados ejercicios que le podrán ayudar a mejorar su situación.

Si tienes algún problema psicológico en temas relacionados con el sexo, apuesta por un Sex Coach y verás cómo te ofrece la ayuda que necesitas.